Uno de los arroces que más gustan en mi casa es el arroz negro con alioli, un arroz sencillísimo y como veis por la foto espectacular a la hora de presentarlo, el sabor que proporciona la tinta es increíble y su preparación también por que no requiere mucho más de media hora, el tiempo de hacer el sofrito y que hierva el arroz. ¿ Qué más se puede pedir?
Pasamos a su elaboración.
ARROZ NEGRO CON ALIOLI
Necesitamos una sepia grande o en su defecto dos medianas. Le pedimos al pescatero que nos las limpie y que nos guarde la tinta. Si la compráis ya limpia, la tinta la podéis encontrar en bolsitas en cualquier gran-superficie.
Una vez costada a trocitos la ponemos a sofreír en una paella con medio vaso de aceite, ojo que salta, poner tapadera, mientras se hace, cortamos 1 cebolla grande y 1 pimiento verde en trocitos no muy grandes, a mi particularmente me gusta encontrarme la verdura, pero si no os gusta la pasáis por la batidora.
Se lo añadimos a la jibia y seguimos rehogándolo todo junto por espacio de 10 minutos, llega la hora de echar el arroz, con los arroces siempre os diré lo mismo, según lo hagáis normalmente, yo lo hago por puñados, dos puñados por persona por un vaso de los de caldo, pues bien, añadimos el arroz y le echamos la tinta diluida en un poquito de agua, seguimos removiendo.
Llega la hora del agua o del fume de pescado, por esto es importante que nunca tiréis cabezas ni raspas del pescado, con un tomate un puerro y un poco de perejil podemos tener un caldo en 15 minutos y congelarlo para cuando lo necesitemos. Tenedlo siempre al lado del arroz por si el arroz os pidiera más, cada arroz evoluciona de manera diferente y para esto no hay medidas exactas, todo el que haga arroces a menudo lo sabe.
Este arroz debe moverse mientras se hace, a poder ser con una cuchara de madera, tenemos que hacer un arroz meloso, no una paella valenciana. Añadimos en este punto un majado de ajos y pimientos morrones más un poco de sal, esto cambiará por completo el aroma y sabor del arroz, hace que sepa a los de antes.
Probar durante la cocción y si fuera preciso rectificáis de sal, cuando esté en su punto ( sobre unos 20 minutos según la marca y variedad ) lo retiráis y lo dejáis reposar tapado con un trapo limpio. Como opcional se le pueden añadir unas gambitas peladas y unas tiras de pimientos asados.
Mientras reposa, se prepara el alioli , en la batidora se hace en un plis, 1 vaso de aceite de girasol, una pizca de sal, 1 huevo entero, 1 ajo y un buen chorro de limón, todo ello en el vaso de la batidora, ponéis el brazo en el fondo y la máxima potencia, el alioli empezará a subir como por arte de magia. No mováis mucho el brazo, él sube solo. Bon apetit¡¡